La Administración gallega abonará de
oficio la parte devengada de la paga extra del primer semestre del 2013 a los
trabajadores públicos. Lo que traducido son 180 euros de media para cada empleado y
que se corresponde con los meses de enero y febrero de aquel año. El ingreso se realizará antes de que termine el
2016. El conselleiro de Facenda presentó ayer en el
Parlamento gallego el proyecto de ley, que tendrá un coste aproximado para el
gobierno autónomo de unos 25 millones de euros.
Además, en ese acuerdo la Xunta se comprometió a recuperar a partir de
enero del 2017 -un año antes de lo estipulado en un primer momento-, el pago
del 100 % de las pagas extras.
La devolución beneficiará al conjunto de empleados públicos autonómicos: tanto a personal funcionario como a personal laboral,
personal estatuario de Sanidade, al personal docente y no docente de enseñanza, a personal administrativo de Xustiza y
a empleados de las entidades instrumentales del sector público autonómico.
Asimismo, se extiende al personas de las universidades públicas y a la
plantilla de la enseñanza concertada.
«Os empregados galegos que axudaron tanto a
soportar a crise económica, recuperarán a partir do 1 de xaneiro as pagas
extras que tiñan antes da crise», apuntó el
titular de Facenda, que a su vez destacó que, de esta manera, quedan cancelados
los ajustes retributivos generales a los empleados públicos que realizó la
Administración autonómica para blindar los servicios públicos.
La Xunta efectuará
esta devolución de oficio: evitando que los trabajadores tengan que presentar
un recurso.