Firman una carta en la que reclaman una subida salarial porque una
reforma les obliga a realizar nuevas tareas que antes correspondían a los
magistrados.
La Justicia de Vigo corre riesgo de paralizarse en el
2018 si no prosperan las negociaciones entre los letrados de la Administración
de Justicia y el Gobierno para un aumento del sueldo como compensación por una
reforma que les encomienda hacer tareas que hasta ahora eran competencia de los
jueces. Por poner un ejemplo, los tribunales de lo civil de Vigo registraron
615 casos de jurisdicción voluntaria en el 2017 cuya competencia recae en el
secretario. También hubo 938 actos de conciliación.
Si el mes pasado 340 funcionarios judiciales de Vigo
desenterraron el hacha de guerra e hicieron dos paros generales para pedir
mejoras salariales a la Xunta, ahora le toca el turno a los letrados
judiciales. Antes de las vacaciones de Navidad, la mayoría de los 35
secretarios judiciales de Vigo (hay otros dos en la Audiencia) se reunieron en
una sala de un juzgado de lo penal para debatir las acciones a emprender para
reclamar mayor salario por más trabajo y tras sufrir años de recortes. En una
primera fase, recogieron decenas de firmas para avalar su reivindicación y que
le entregaron al Ministerio de Justicia al igual que otros compañeros del resto
de España. Si la negociación fracasa, habrá paro.
De lo que no dicen nada es de la carga de trabajo que asumen diariamente los funcionarios de justicia y las tareas que realizan y que corresponden a los secretarios judiciales.